Para cambiar hay que conectar con más profundidad en nuestra esencia, bajar el sonido de nuestro «ruido» interior y exterior. Elegir un ratito de espacio, todos los días, para conectar con nosotros mimos.
Escuchar esa parte interior nuestra que es sabia y que sabe muy bien lo que necesitamos en cada momento. Si conectamos con esa vocecilla sabia interior, veremos con claridad cual es el camino a seguir y nos dará fuerzas para continuar sin miedo a los cambios
Decimos que queremos conseguir esto o aquello (perder peso, buenos hábitos, aprender algo nuevo, hacer ejercicio, cambiar de trabajo…) y luego hacemos todo lo contrario a nuestros propósitos.
No cojas senderos sin salida que no te llevan a ningún lado.
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