Ponerse en forma y adquirir buenos hábitos requiere de cierto esfuerzo, pero es sólo al principio, hasta que se convierte en un hábito y con constancia… para siempre. Y merece la pena, te lo aseguro. A veces para tener lo que quieres (tu peso saludable, verte y sentirte bien…), tienes que hacer lo que no quieres. Tienes que estar dispuest@ a pagar ese pequeño” precio” para poder disfrutar de la recompensa.
Con la práctica del ejercicio físico, el descanso y la alimentación equilibrada, se mejora la calidad de vida y además hay una estrecha conexión, entre lo físico y lo emocional, por lo que repercute también en tus emociones y estado de ánimo. Si te sientes bien con tu cuerpo, te sientes mejor emocionalmente. Por eso, es importante incorporarlo como hábito en tu rutina diaria y es mucho mejor la calidad que cantidad.
La motivación es lo que te hará empezar y el hábito es lo que te hará continuar.
Además, genera endorfinas, las llamadas hormonas de la felicidad, potencian esa sensación de bienestar, placer…nos mejora el estado de ánimo, disminuye el estrés, nos hace desconectar…debería de recetarse como antidepresivo.
Da igual la edad y el peso que tengas, cada un@ puede retarse y desafiarse, según su nivel. No hace falta, si no quieres y no te gusta, ir al gimnasio, ni siquiera dedicarle mucho tiempo al día, eso sí, lo que hagas, hazlo con ganas y con intensidad y rétate un poco más cada día.
Busca en tu día a día, en tu rutina, un espacio para el ejercicio. NO, no digas que no tienes tiempo, tienes 24 horas al día, 168 horas a la semana… ¿no puedes sacar 5 horas a la semana de esas 168? ¡No me lo creo! Tú eliges. Es tu cita diaria con tu salud, bienestar, calidad de vida… agéndalo en tus tareas y empieza ¡Ya!, ¿Qué te gusta? Correr, andar, bailar, bicicleta, nadar, fitness…
Y a parte del ejercicio programado, empieza a moverte más, ve a los sitios andando, sube y baja escaleras, haz las tareas del hogar más rápido…dile adiós a la vida sedentaria, a tantas horas de tumbing, al bus, al coche, al ascensor…tenemos dos piernas y dos brazos estupendos, vamos a moverlos. ¡Dile adiós a la pereza!
Te estoy retando a que salgas de tu zona de confort, de comodidad, de lo que haces siempre…afronta nuevos y pequeños retos, eso es lo que nos da “vidilla”. Lo bueno del ejercicio, es que notas los resultados rápidos y además siempre son buenos.
Ya sabes, metas específicas y pequeñas, las grandes nos pueden hacer tirar la toalla pronto. “Piensa en grande y actúa en pequeñito”. Para subir una escalera alta, primero tienes que ir subiendo escalones uno a uno, hasta llegar al final. El ir consiguiendo pequeñas metas, es lo que hace, que te motives y quieras seguir avanzando.
Y anticípate a todas tus excusas (no tengo tiempo, dinero, estoy cansad@…), escríbelas, para tenerlas presentes y por otro lado, escribe todos los beneficios que te va a aportar el practicar ejercicio físico.
¿Empezamos?
http://www.mundocoachingmagazine.com/muevete-muevete/
Hola Aurora
Problema será si tú lo ves así.
Puedes andar media hora y hacer algo en tu casa. Si has cogido 20 kilos, habrá algo más no creo que sea el no hacer más ejercicio.
El reto estará bien. A parte mirar que hay de raíz que te ha llevado a eso 20 kilos. Eso es un tema más un proceso en sí y verlo en sesión. No sabría ahora decirte.
un abrazo
Buenos dias, mi problema es que tengo una enfermedad crónica desde hace 3 años y hace que no pueda realizar todo el ejercicio que quiero. Los médicos solo me dejan andar media hora por la mañana y algo de ejercicio de suelo en casa otra media hora, despues necesito muchor eposo para recuperar energías y no caerme. Esto ha hecho que coja 20 kilos. Por donde empiezo?. Me he apuntado al reto que comienza mañana, a ver si lo puedo seguir.