¿Por qué sigues haciendo dietas si ya sabes que no te funcionan?
¿Cuántas dietas has hecho en tu vida? Piénsalo por un momento.
Y ahora responde con sinceridad: ¿te ha funcionado realmente alguna de las dietas que has hecho? porque te habrán podido funcionar mientras las hacías, pero seguro que después de unos meses has vuelto a recuperar el peso perdido, e incluso más.
Entonces, si nunca te han funcionado… ¿por qué sigues haciendo dietas?
No te sigas engañando y deja de poner el foco en todo eso que ya sabes que no funciona.
Abre tu mente y haz las cosas de una manera diferente a lo que estás acostumbrada. Y no me refiero a otra dieta con distinto nombre, sino a que pruebes algo nuevo a nivel mental.
¿Por qué no pruebas algo diferente?
Si tu lenguaje interior es constantemente negativo, no te va a ayudar nada a conseguir tu estilo de vida saludable, porque va en contra totalmente de lo que tú quieres. Lo que tú quieres es cuidarte, hablarte bien, estar bien contigo misma, tener una relación sana con la comida, comer tranquila, en paz y en calma.
Y lo que sucede es que te enfocas en lo que no tienes y en lo que te falta. Así que lo único que haces es postergar tu felicidad y tu bienestar.
Si ya has probado a poner el foco fuera: en dietas y productos adelgazantes, en la báscula… y ves que por ahí no hay resultados buenos y duraderos… ¿por qué no pruebas algo diferente?
¿Por qué no pones el foco en tu mente para saber qué patrones de pensamiento son los que te están impidiendo adelgazar?
El origen y la solución está en tu mente
Adelgazar es un proceso que empieza en la mente y es por ahí, por donde tienes que empezar.
Hay una nutrición por la que alimentas a tu cuerpo. Y hay otra “nutrición mental” que es mucho más importante, que es con la que alimentas a tu mente.
Sí, lo lees bien. Me refiero a todas esas cosas que le dices a tu mente, lo que te hablas, ese diálogo interno que mantienes contigo misma. El problema está en esa historia que te cuentas, que le cuentas a tu mente. Porque esos pensamientos que tienes te generan comportamientos negativos que te impiden adelgazar.
No hay un cambio de verdad en tu cuerpo y en tu estilo de vida si no hay primero un cambio en tu mente. Ese es el camino más efectivo y duradero.
Si todo empieza en tu mente y con tus pensamientos es por ahí por dónde tienes que empezar. En tu mente está el origen y también la solución.
Toma conciencia de tu diálogo interior, de las creencias que tienes sobre la comida y de qué emociones son las que te llevan a comer. Y con todo esto, toma la decisión de reprogramar tu mente para cambiar tus patrones de pensamiento, porque no quieres seguir así.
Tus patrones de pensamiento son los responsables de que no consigas adelgazar
No puedes tener un peso saludable si vas por la vida escuchando continuamente tu diálogo interior negativo, que ni te has cuestionado de dónde viene.
Ese diálogo interior viene, principalmente de tu infancia y adolescencia. Tus patrones de pensamiento se van formando con todo lo que ves y escuchas a tus padres, abuelos, profesores, personas referentes y también por tus experiencias vividas, educación, cultura…
Párate y mira qué te estás diciendo y no te asocies con esos pensamientos negativos. Date cuenta que tu diálogo interno te destruye: “soy gorda”, “no valgo para nada”, “qué mala suerte tengo”… o te construye: “soy potente”, “soy poderosa”, “voy a conseguir mi objetivo”…
Es hora de que te cuestiones todo esto, y que reprogrames tu mente para cambiar los patrones de pensamiento que te están impidiendo adelgazar.
¿Cómo cambiar tus patrones de pensamiento con la reprogramación mental?
Y ahora me dirás: “sí, todo eso está muy bien, pero ¿cómo reprogramo mi mente?”.
A lo que te contesto: es tan fácil como cambiar tu manera de pensar.
Tus hábitos vienen de unos patrones mentales que hacen que acudas a la comida para tapar un vacío emocional. Ahí es donde debes poner tu foco. En tu mente.
A día de hoy, estás en un punto A. Partes de un pasado que es el que te ha hecho ser lo que eres hoy y si quieres llegar al punto B, tendrás que sembrar cosas distintas y no seguir haciendo más de lo mismo.
Enfócate en cómo te quieres sentir y ver. Eso es lo que realmente va a motivarte.
Si lo que quieres es un estilo de vida diferente, tienes que convertirte en una persona totalmente diferente. Y al cambiar tu forma de pensar, hará que actúes como esa mujer en su peso saludable en la que quieres convertirte.
No hay ninguna varita mágica que cambie las cosas de golpe, pero cuando haces ese clic mental, que te desbloquea a nivel inconsciente, y vas cambiando tus patrones de pensamiento, los resultados son sorprendentes.
Un abrazote cargado de energía
May
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